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A los
largo de los estudios en medicinas tradicionales orientales en los que me
interesó formarme desde siempre, comprendo que hay una “medicina” innata en
todo ser humano, capaz de sanarse a sí mismo entendiéndose como un “ser
superior”, parte de un todo.
Hoy por
hoy, entiendo que es el desarrollo de la propia percepción la herramienta
más eficaz de la que dispone el ser humano para poder ir alcanzando un
estado de mayor comprensión, tanto de sí mismo como de su entorno, y a
través del recorrido de ese “camino” poder ir sanando las distintas
situaciones con las que cada uno tenga que lidiar a lo largo de su vida.
Al tomar
contacto con el Nuad Bo-rarn, y a través de su aprendizaje, descubrí que es
un excelente medio para desarrollar dicha percepción y, a la vez, poder
ayudar a otros a conocerse mejor, avanzando en el camino de la propia
sanación, recuperando el natural estado de salud utilizando esta generosa
herramienta terapéutica.
Es por
esto que, cuado me pidieron que comenzara a enseñarlo, entendí que era el
momento de compartir esta disciplina con aquellos que así lo desearan.
Desde
entonces, comencé a transmitirlo, teniendo como objetivos fundamentales:
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Transmitir
mis conocimientos y mi experiencia en Nuad Bo-rarn, entendiéndolo como una
experiencia de desarrollo del propio conocimiento, aumentando la conciencia
corporal.
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Formar
terapeutas de excelente nivel técnico, y acompañarlos en el camino de su
propio descubrimiento.
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Mantener
vivo el concepto de “unidad”, colaborando con el desbloqueo de las
estructuras y la apertura del corazón, y desarrollando la empatía.
-
Mantener
grupos de estudio reducidos, generando relaciones personalizas para poder
acompañar a los participantes en el proceso personal que comienzan al
iniciarse en el estudio de Nuad Bo-rarn.
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Generar
espacios en los que los integrantes de los diferentes grupos puedan
relacionarse, facilitando la interacción y el “dar y recibir” entre ellos,
permitiendo alcanzar un alto nivel de conocimiento de la disciplina.
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Compartir
con los participantes conceptos orientales que llevan hacia una actitud
interna de humildad, compasión, comprensión y respeto, pilares de la
filosofía oriental y de todo servicio hacia el otro.
Por otro lado, verán que
al final de cada página transcribí un cuento, ó leyenda, etc. Eso
corresponde a mi objetivo al momento de crear esta web, ya que no solo es el
poder llegar a uds., sino abrir un medio para acompañar a aquellos que
deseen elevar su estado de amor...
Si
no hay otro que brinde su cuerpo,
el terapeuta no puede desarrollarse como
tal…
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